La melisa es excelente para combatir estados nerviosos ya que es ligeramente hipnótica y funciona como sedante, sobretodo en  casos de ataques de ansiedad, irritabilidad, hiperactividad, o alguna alteración del sueño.  Es capaz de aliviar migrañas, controla y regula la presión arterial. Puede disminuir tanto el dolor cervical como el lumbar, incluso logrando mejoras en los dolores relacionados con la menstruación.  Ayuda a disminuir los gases, diarrea, náuseas y problemas digestivos.  Es muy buena para la asimilación de alimentos y el mal aliento. Puede ayudar con enfermedades respiratorias al  tratar la gripe y bajar la fiebre.   

En extracto natural o tintura madre, la dosis recomendada de Melisa es de 30 gotas, 3 veces por día. Se suelen realizar tratamientos de 10 dias aproximadamente, pudiendo dejar una semana de descanso en el medio.